Con la instalación hoy de los primeros equipos en el Hospital Universitario de Ourense, comienza el proceso de renovación de la iluminación de los 26 quirófanos de los hospitales públicos de Ourense, Verín y Valdeorras, gracias a una iniciativa para la adquisición de nuevas lámparas quirúrgicas, en la que la Xunta de Galicia invierte en esta provincia la mayor partida por Áreas Sanitarias: 589.875 euros, el 42% de un presupuesto total que asciende a 1.4 millons.

El contrato, que se formalizó el pasado mes de julio, permitirá renovar 97 quirófanos de toda Galicia, los 20 quirófanos del Hospital Universitario de Ourense (con un importe de 471.900 euros); 2 en el Hospital Público de Verín (23.596 ); y 4 en el de Valdeorras (94.380).

La empresa adjudicataria, Dräger Medical Hispania S.A.,  dispone de un período de dos meses de plazo para completar la instalación de los dispositivos, que se distribuirán mayoritariamente en el mes de septiembre tras la colocación estos días de los cinco primeros en el Hospital Universitario de Ourense..

Con este equipamiento los quirófanos públicos se adaptan a la tecnología led de última generación de 160.000 lux, que incorpora también un sistema de control de sombra. Diseñados para dar la máxima luz posible, esta es regulable en intensidad y color en hasta doce pasos, o continua. Cuentan con dos brazos, para lámpara principal y a satélite, ampliables sin obras de adaptación, sincronizadas y con un control táctil, directamente en el mango de la lámpara o en la pared; igualmente disponen de 6 ejes de angulación, y permiten un amplio radio de luz y hasta 360 grados de rotación..

Además,  diez de los equipos que se instalarán en esta área sanitario integran una cámara de vídeo, de alta definición y wifi, para la retransmisión de la imagen, sin necesidad de cableado hasta un aula docente o sala donde se queira replicar, así como monitores de 31 pulgadas de grado médico.

De cara a su usabilidad, aporta grandes mejoras para los profesionales facilitando el manejo y mejorando la confortabilidad del personal quirúrgico, ya que una de sus ventajas es que no emiten calor -cero grados de incremento de la temperatura-  tanto en el campo quirúrgico, como a centímetros de los cirujanos.

Con una vida útil de más de 60.000 horas y opción de relevo parcial de los diodos, las nuevas fuentes de luz son de bajo consumo, y posibilitan un aprovechamiento más eficiente de la energía, en la línea de la  estrategia del Servicio Gallego de Salud de favorecer un uso más racional del consumo eléctrico y contribuir a la sostenibilidad del sistema sanitario.

El suministro de estos equipos es susceptible de financiación mediante el programa operativo FEDER-Galicia como parte de la respuesta de la UE a la pandemia provocada por la covid-19.